El año pasado estuvieron en casa pasando unos días Silvia y Florián y uno de esos días Florián nos hizo esta receta de curry. Tuvo tanto éxito entre nuestras hijas que Ana la empezó a hacer, pero a pesar de no haberla hecho yo con mis propias manos hemos decidido documentarla en este “testamento culinario” para ellas que es este blog.
Ingredientes
- 2 pechugas grandes de pollo.
- 1 berenjena grande.
- 1 calabacín.
- 1 puerro
- 1 cebolla mediana.
- 1/2 pimiento rojo.
- 1/2 verde no le gusta mucho a Isabel.
- 1 patata mediana.
- 3 cucharadas soperas de pasta de curry ver foto.
- 1 cucharada de café de jengibre.
- 2 rodajas de piña natural es importante que este madura.
- 200 ml de leche de coco.
- Agua.
- 1 cucharada de café de polvo de curry.
- Pimienta.
- Aceite y sal.
Notas
El brécol le va muy bien a este plato, pero no teníamos en casa.
Instrucciones
- Cortamos las pechugas en cuadrados (la idea es que el tamaño de cada cosa sea similar: pollo, calabacín, berenjena, etc.
- Ponemos un wok (o cacerola) con aceite caliente y damos una vuelta al pollo.
- Añadimos las verduras.
- Cuando el pollo se pone blanco echamos la pasta de curry y el jengibre y lo vamos dando a todo vueltas durante unos 5 minutos.
- Añadimos todas las verduras y removemos bien.
- Damos vueltas de vez en cuando y dejamos que esté ahí durante no menos de 10 minutos.
- Mientras se hace cortamos la piña, en trozos similares a los de las otras verduras.
- Cuando faltan cinco minutos añadimos la piña y vamos removiendo, la piña debe soltar su jugo.
- Cuando está hecho añadimos la leche de coco (remover bien el bote de leche para que se mezcle bien).
- Añadimos la leche de coco
- Completamos hasta cubrir con agua.
- Añadimos el polvo de curry y removemos.
- Dejamos que hierva hasta que se espese un poco la salsa que debe quedar como una crema, dependerá del agua añadida pero estará en torno a los 15 minutos.
- Servimos recién salido del fuego. ¡Que aproveche!
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